Winston
Chilote Llenas, el deportista que más éxitos ha acumulado en el béisbol
dominicano, pero su inicio no fue nada fácil, pues en su primer año en
el béisbol organizado los Atléticos de Kansas City, le dieron de baja
pues no el destacado atleta no pudo contener más el dolor por ver a su
madre que estaba en los finales de su enfermedad, Magda Aracelis Dávila,
padecía de cáncer en Nueva York, quien falleció al día siguiente de
recibir la visita de su hijo adorado.
“ Fue un momento difícil pues apenas tenía 16 años, mi madre padecía
de cáncer de mama, no me dieron permiso y me fui a Nueva York, para
verla en sus últimas horas de vida, sé que lo hice mal, pero el dolor de
madre vale más que cualquier cosa en la tierra”, dijo Llenas.
Recordó con nostalgia y orgullo de la madre que tuvo y dijo “ me voy a verla”.
Manifestó que al fallecer su madre, el dinero que ganó le alcanzó
para llevar a Santiago, para su entierro, junto a su familia. Como no
tenía trabajo en el béisbol se quedó trabajando en Nueva York.
Chilote, recuerda a su madre Magda Aracelis Dávila, quien fue muy
cariñosa y protegió a sus hijos. Recuerda su padre Antonio Llenas, quien
puedo verlo en las grandes ligas, algo que no pudo su madre.
Sus inicios no fueron nada de felicidad, pues tuvo que vencer muchos
obstáculos jugando en las ligas menores, donde le daban tres dólares de
dieta para comer junto a seis compañeros más que vivían en una casa y
cada uno pagaba 10 dólares mensuales, además comprar la comida, donde
cocinaban y limpiaban la casa.
Su brillante carrera comenzó con la firma por parte de los Atléticos
de Kansas City, luego lo dejaron libre , al siguiente año fue firmado
por los Angelinos de California, por la suma de 500 dólares, que se
encontraba fuera de la organización del béisbol, pues lo Kansas City, le
dejo fuera. Llegó a la organización como tercera base, luego lo pasaron
a la segunda. Su primer salario en las GL fue de 7.500 dólares y al
final de su carrera ganó 42.000 dólares.
Recordó que se casó en el año 1966, estando en doble A, con su novia Cecilia, donde ha procreado sus hijas y nietos.
Nunca permitió injusticia en su contra, pues muchas veces bateaba 340 y le daban oportunidad a los que bateaban de 240.
En tiempo del racismo, le llevaba a ayudar a jugadores y llevarle la comida a la guagua.
Jugó en la Liga de México, antes de llegar a GL, a título de préstamo.
Chilote dijo a la hora de su firma no era ni chiquito, ni gordito, sino latino.
Llenas, fue entrevistado en el programa la Semana Deportiva, que se transmite por CDNSport, por el cronista Héctor.J. Cruz.
Recuerda que su debuto en las menores, en doble A, en triple A, en
las grandes ligas y en el béisbol dominicano, por casualidad, se
enfrentó a un lanzador zurdo.
Citó a varios jugadores que estuvieron a su lado en las grandes ligas y algunos están en Cooperstown.
En el país jugó aara las Aguilas Cibaeñas, como jugador, capitán, gerente general, manager y presidente
Llenas Dávila, apodado “Chilote” (nacido el 23 de septiembre de 1943
en Santiago) es un ex utility jugador jugó en las Grandes Ligas de
Béisbol para California Angels de 1968 a 1969, y nuevamente de 1972 a
1975. También jugó una temporada en Japón con los Saitama Seibu Lions en
1976.
Llenas firmó con los Kansas City Athletics como amateur antes de la
temporada de 1961, luego fue puesto en libertad por ellos el 16 de junio
de 1962. Jugó 153 partidos para la organizaciones de Sophomore League y
Florida State League, bateando.232 y cometiendo 60 errores. Cerca de 5
meses y medio después, a los 19 años, firmó como agente libre con los
Angelinos de Los Angeles el 2 de diciembre de 1962.
Como Llenas maduró, se convirtió en un excelente bateador de ligas
menores. Hizo su debut en Grandes Ligas el 15 de agosto de 1968 contra
los Senadores de Washington en el Anaheim Stadium. Se desempeñó como
tercera base, bateó sexto en la alineación, y se fue de 1-3 con un doble
y una carrera anotada en una victoria 3-1 contra el abridor Frank
Bertaina.
Su mejor temporada fue en 1973 cuando lideró la Liga Americana como
emergente en hits (16) y turnos al bate (56). También hizo récord en su
carrera en partidos jugados (78), promedio de bateo (.269) y carreras
impulsadas (25). Se acostumbró a ser bateador emergente la gran parte de
su carrera en Grandes Ligas. En la mayoría de los juegos se desempeñaba
como tercera base. Su mejor posición, sin embargo, fue la segunda base,
donde tuvo un total de 111 oportunidades sin cometer un solo error.
En su carrera total de 300 juegos incluye un promedio de bateo de.230, 3 HR, 61 RBI y 50 carreras anotadas.